La Cámara de Diputados vivió este miércoles una nueva jornada de alta tensión que terminó en escándalo y a los empujones. El presidente del cuerpo, Martín Menem, levantó la sesión cuando los ánimos se desbordaron y legisladores ligados al peronismo fueron a increpar al diputado libertario José Luis Espert.
El episodio ocurrió en medio de un debate cargado de cruces verbales. Los legisladores kirchneristas se acercaron a Espert, a quien reprochan insultos recientes contra Florencia Kirchner y lo vinculan con la denuncia de que le arrojaron excremento en su casa, hecho por el cual hubo militantes detenidos y se movilizó a gran parte de las herramientas de la Justicia para esclarecer el hecho.
El clima se tornó incontrolable, con empujones y gritos en el recinto, lo que obligó a interrumpir el tratamiento del resto del temario del día.
Hasta el momento de la suspensión, se rechazaron tratar sobre tablas los proyectos para el aumento presupuestario para las universidades y la declaración de emergencia del Hospital Garrahan, luego del voto negativo del oficialismo, el PRO y parte de los aliados radicales
Quedaron sin votar otros temas previstos, como los proyectos sobre retenciones agropecuarias, pymes y salud mental.
Menem decidió levantar la sesión para evitar mayores incidentes y convocará nuevamente para continuar con los asuntos pendientes.