La movilización inició alrededor de las 19, con especial énfasis en un pedido de justicia por el brutal crimen de “Chichina”, aunque también abarcaba los reclamos por diversos hechos de inseguridad ocurridos en la ciudad en el último tiempo. La columna de vecinos se dirigió, luego de la parada inicial frente a la Municipalidad, hacia la sede de la Comisaría 2da. Indignados por la ausencia de respuestas de las autoridades locales, los autoconvocados se trasladaron hasta la sede social del Club Villa Cassini, donde el intendente presentaba una nueva edición de la Expo Motor, permaneciendo totalmente ajeno al crimen de una vecina ocurrido hace tan sólo pocos días.

Ya en el lugar, vecinos y vecinas increparon al secretario de Gobierno, Edgardo Migliozzi, por no “dar la cara”. Y la respuesta del funcionario sólo generó más indignación y desató la ira de los presentes. “No hay un pedido formal de reunión”, dijo, al tiempo que aseguró que se encontraba presente en la Municipalidad cuando se había iniciado la marcha.

“Hubieses salido si nos viste, qué nos tomás el pelo”, expresó enfurecida una de las vecinas, y agregó: “Te pagamos un sueldo millonario para que no nos hables, para que no des la cara. Cuándo pensaban dar la cara”.

En un clima siempre tenso, los vecinos y vecinas insistieron con los reclamos y exigieron respuestas a las autoridades locales, que sólo respondieron evasivas y sostuvieron una y otra vez que la ciudad carece de recursos para brindar seguridad y manifestaron una supuesta discriminación por parte del gobierno provincial.

“La investigación está bien orientada y me parece que se va a resolver”, deslizó el mandatario en medio de la discusión con los vecinos, para intentar calmar los ánimos, aunque no brindó ninguna precisión al respecto. Si bien sostuvo que el reclamo es legítimo, también señaló que detrás de la manifestación había motivaciones políticas.

“Indudablemente se mezcla un poco todo, participa alguna cuestión política”, aseguró Cinalli en diálogo con los medios de comunicación presentes e intentó deslizar responsabilidades por parte del municipio, apuntando a la falta de recursos para brindar seguridad por decisiones del gobierno provincial.

Por otro lado, vinculó el crecimiento de hechos delictivos al desempleo y al consumo problemático de sustancias. “Tenemos indudablemente una sociedad atravesada por las adicciones y las adicciones son caras. Cuando no hay recursos también significa que salen a delinquir para poder conseguir y esto es una situación social que se va a tener que buscar una solución pero a nivel nacional”, indicó Cinalli.